También se conoce, que la relación entre la sintomatología y lo que se puede visualizar en estudios complementarios por imagen en pacientes asintomáticos es baja. 5, 10 Dhillon , cuestiona Los estudios por imágenes, diciendo que no tienen mucho valor para dilucidar la causa del dolor de hombro y en el diagnóstico de impigement subacromial. “Una resonancia magnética mostrará patología en del manguito rotador y bursitis, pero no identificará que es lo que está causando el dolor en el hombro”.6
En líneas generales, existen diversos estudios que evidenciarían una gran disparidad en lo que respecta a la aplicación e interpretación de test ortopédicos, lo cual obstaculiza la síntesis de éstas y por ende la aplicabilidad clínica.5-6-10-12
ENTONCES… ¿COMO DETERMINAMOS QUÉ ESTRUCTURA ES LA QUE ESTÁ PRODUCIENDO EL DOLOR?
Por el momento parece ser algo complicado de responder, y no hay consenso al respecto.
Se han propuesto diferentes hipótesis para describir la patogénesis de esta afección, pero aún no se ha encontrado una explicación clara. La escasa especificidad diagnostica podría estar relacionada al alto porcentaje de recidivas en el tratamiento de las patologías asociadas al manguito rotador.
Jeremy Lewis (2016) manifiesta que hasta el momento, no podemos estar cien por ciento seguros de que es el manguito rotador el que está produciendo el dolor debido a la cantidad de estructuras que se encuentran en la zona subacromial . 7-8
Por su parte, Ann Cools en su artículo Shoulder pain: Can one label satisfy everyone and everything? propone dejar de lado las “Etiquetas o rótulos Diagnósticos”, y centrarse en patrones de discapacidad, para clasificar a los pacientes en función de la disfunción del movimiento, hasta tanto nuevas investigaciones respondan a todas estas preguntas.9